Cuando escuchamos la frase “comer bien”, lo primero que suele venir a la mente son dietas estrictas, contar calorías o eliminar por completo ciertos alimentos. Sin embargo, comer bien no significa vivir a base de restricciones, sino aprender a nutrir tu cuerpo de forma inteligente, equilibrada y sostenible a lo largo del tiempo.
Mejorar tu alimentación no se trata de castigos ni sacrificios extremos, sino de construir hábitos que te hagan sentir con más energía, mejorar tu estado de ánimo y cuidar tu salud física y mental.
No solo es una dieta rigurosa
Uno de los mayores errores al intentar alimentarse mejor es pensar que las dietas suelen ser temporales, rígidas y difíciles de mantener, lo que provoca el conocido “efecto rebote”: bajas de peso rápidamente, pero luego recuperas lo perdido (y a veces más).
Comer bien, en cambio, es adoptar un estilo de vida donde eliges alimentos que nutran tu cuerpo sin sentir culpa o ansiedad. Esto implica aprender a escuchar tus señales de hambre y saciedad, disfrutar los alimentos sin excesos y hacer elecciones conscientes la mayor parte del tiempo. Puedes disfrutar un postre o tu comida favorita ocasionalmente, siempre que tu alimentación en general sea balanceada.
¿Qué es lo que debes hacer?
- No intentes eliminar de golpe todos los procesados. Empieza sumando: agrega una fruta al desayuno, una ensalada a tu comida o frutos secos como snack. A medida que añades alimentos saludables, disminuirán de forma natural los menos nutritivos.
- Dedica un día a la semana para planear tus menús y comprar lo necesario. Tener opciones listas en casa hará que te sea más fácil comer bien, incluso en días ocupados. Esto evitará que hagas decisiones impulsivas cuando tienes hambre.
- Lleva siempre una botella de agua contigo y establece recordatorios en tu teléfono si sueles olvidar beberla durante el día.
- Piensa en pequeños pasos: cambiar el refresco por agua, incluir una verdura más al día o preparar tu desayuno en casa. Con el tiempo, estos cambios suman y transforman tu salud.
Comer bien es un acto de autocuidado, no de castigo. No se trata de seguir dietas extremas ni de eliminar todo lo que disfrutas, sino de aprender a nutrirte de forma equilibrada.
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Referencias:
- Secretaría de Salud | Alimentación sana y balanceada para una buena salud. Recuperado de: https://www.gob.mx/salud/articulos/alimentacion-sana-y-balanceada-para-una-buena-salud
- Instituto de Salud Digestiva | Ideas para mejorar tu alimentación. Recuperado de: https://www.gruporecoletas.com/noticias/mejorar-tu-alimentacion/




