El pan ha sido un alimento básico por miles de años. Sin embargo, últimamente ha ganado una reputación negativa, especialmente con el auge de dietas bajas en carbohidratos y sin gluten.
Esto ha generado una pregunta recurrente: ¿es realmente malo para nuestra salud o es solo un mito? Para responder esto, es importante conocer los diferentes tipos de pan, sus componentes nutricionales y cómo su consumo puede afectar de manera positiva o negativa nuestra salud.
Por ejemplo, uno de sus principales beneficios son:
- Proporcionan energía.
- Ayuda a mejorar la digestión.
- Frena el envejecimiento celular.
- Mantiene los niveles de azúcar
Si bien el pan en sí no es “malo”, algunos tipos de pan pueden ser menos saludables debido a la forma en que son producidos. Por lo que, en lugar de evitar consumirlo, la opción más saludable es conocer qué contiene cada rebanada y qué cantidad conviene consumir.
- Pan blanco: Está hecho de harina refinada, un proceso que pierde la mayoría de sus nutrientes y fibra.
- Procesados: Muchos panes comerciales contienen aditivos, conservadores y azúcares añadidos que son perjudiciales si se consumen en exceso.
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Referencias
- Mejor con Salud | ¿Por qué no es bueno consumir pan? (s.f). Recuperado el 10 de octubre del 2024, de: https://mejorconsalud.as.com/no-bueno-consumir-pan/
