Se sabe que el hígado es un órgano que hace de todo un poco: desde filtrar toxinas hasta ayudar en la digestión de las grasas. Cuando algo va mal en su funcionamiento y se inflama, eso es la hepatitis. Esta inflamación puede ser causada por varios factores, incluyendo el consumo excesivo de alcohol, infecciones virales, ciertos medicamentos, entre otros.

Sin embargo, hay distintos tipos y se clasifican principalmente según el virus. Aunque los más comunes son:

• Hepatitis A: Se transmite a través de alimentos y agua contaminados con heces infectadas. Aunque no suele convertirse en una enfermedad crónica y no necesita tratamiento, la mayoría de las personas se recuperan por completo con buenos hábitos de higiene y con la vacuna. Los síntomas son cansancio, náuseas, diarrea repentina, dolor abdominal, fiebre y orina oscura.
  
  
• Hepatitis B: Se transmite a través de la sangre y otros fluidos corporales. Esto significa que se puede contraer por contacto sexual, compartiendo agujas e incluso de madre a hijo. Si no se detecta a tiempo, aumenta el riesgo de desarrollar insuficiencia hepática, cáncer de hígado o cirrosis. Los síntomas suelen aparecer después de 4 meses aproximadamente y algunos son dolor en las articulaciones, pérdida del apetito, color amarillento en la piel y fatiga.
  
  
• Hepatitis C: Es una infección vírica que causa la hinchazón del hígado y que a menudo, se puede convertir en una enfermedad crónica. Su detección puede ser tardío debido a que los síntomas tardan décadas en aparecer. Cuando aparecen, suelen ser náuseas, fiebre, ictericia, aparición de moretones y sangrado con facilidad.

Si crees que podrías tener hepatitis, lo mejor es acudir con un médico lo antes posible. El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden hacer una gran diferencia, especialmente cuando se trata de casos de hepatitis B y C.

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A nivel mundial, las hepatitis virales son un problema de Salud Pública, ya que son una de las enfermedades más infecciosas y graves. Por lo tanto, es esencial adoptar hábitos saludables para prevenir. A continuación, te contamos algunos tips:

• Consulta con tu médico y asegúrate de estar al día con tu esquema de vacunación.
• Lávate las manos frecuentemente, especialmente antes y después de comer e ir al baño.
• Usa preservativos para reducir el riesgo de transmisión de la hepatitis.
• Evita compartir artículos personales como cepillos de dientes, rastrillo o cualquier cosa que pueda contener sangre.
• Mantén tu cuerpo en movimiento para fortalecer tu sistema inmunológico.

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Referencias:

• Vacunación | ¿Hay Hepatitis en México? (2022). Recuperado el 11 de junio del 2024, de: https://vacunacion.org/2022/08/11/hay-hepatitis-en-mexico/
• IMSS | Hepatitis (s.f). Recuperado el 11 de junio del 2024, de: https://www.imss.gob.mx/salud-en-linea/hepatitis