Hoy más que nunca es una prioridad mantener nuestro cuerpo y sistema inmune en un estado saludable. Por ello, queremos compartirte algunos datos de las vitaminas y minerales que te ayudarán a cuidarlos.

Considera que existen varios factores que pueden influir en el correcto funcionamiento del sistema inmune, uno de ellos es la nutrición, y es que existe una relación directa entre: una alimentación rica en nutrientes, la respuesta de nuestro cuerpo frente a infecciones y la inmunidad.

Las características inmunes del cuerpo humano son diferentes durante cada etapa de la vida, por tal motivo, la recurrencia (que tan frecuente) y la gravedad de las enfermedades e infecciones que puede desarrollar una persona varia entre una y otra, así como dependiendo de la edad y otros factores. No obstante, una mala nutrición llega a comprometer las funciones del sistema inmune, y aumentar el riesgo de una infección.

¿Qué vitaminas y minerales ayudan a tu sistema inmune?

En realidad, hay varios micronutrientes que ayudan a fortalecer el sistema inmune, entre ellos, las vitaminas A, C y E, así como el ácido fólico, hierro y zinc. Recuerda que la función inmune puede mejorarse llevando los bajos niveles de micronutrientes a los recomendados.

La función de cada vitamina y mineral en tu cuerpo es la siguiente:

• La vitamina A es un nutriente que influye directamente en la visión, el crecimiento, la división celular y la inmunidad. También tiene propiedades antioxidantes. Está presente en muchos alimentos, como la espinaca, los lácteos, el hígado, las zanahorias y el melón.
  
• La vitamina C es un antioxidante eficaz que protege a las células. Además, regenera otros antioxidantes importantes como la vitamina E a su estado activo. El cuerpo la necesita para formar los vasos sanguíneos, los cartílagos, los músculos y el colágeno en los huesos. Los cítricos son una fuente de vitamina C.
  
• La vitamina E es un nutriente esencial para la visión y la salud de la sangre, el cerebro y la piel. Los alimentos ricos en esta vitamina son el aceite de oliva, las almendras y los maníes, pero también es viable obtenerla de la carne.
  
• El ácido fólico es fundamental para la formación de los glóbulos rojos, así como para un normal crecimiento y funcionamiento de las células. Durante las primeras etapas del embarazo reduce el riesgo de que el bebé tenga defectos congénitos en el cerebro y la columna vertebral.
  
• El hierro participa en la producción de hemoglobina, componente principal de los glóbulos rojos. También contribuye a la formación de las proteínas musculares y a la metabolización de ciertas enzimas del cuerpo. Por si fuera poco, es uno de los principales indicadores de que el organismo trabaja de manera correcta o de que algo falla.
  
• El zinc es un nutriente que se encuentra en todo el cuerpo. Ayuda al sistema inmune y al metabolismo. Extra a ello, favorece la curación de heridas. Con una dieta variada, por lo regular, el cuerpo obtiene suficiente zinc de fuentes como el pollo, la carne roja y los cereales fortificados.

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Fuente:

– Clínica Mayo. Sitios consultados en mayo de 2020: https://www.mayoclinic.org/es-es/drugs-supplements-vitamin-a/art-20365945; https://www.mayoclinic.org/es-es/drugs-supplements-vitamin-e/art-20364144; https://www.mayoclinic.org/es-es/drugs-supplements-vitamin-c/art-20363932; https://www.mayoclinic.org/es-es/seo/art-20364625