El cáncer de mama es una enfermedad que ataca a mujeres de todo el mundo, y México no es la excepción. La detección temprana de este padecimiento es fundamental para tratarlo, de ahí la importancia de que las mujeres se realicen la mastografía y autoexploración. En este artículo te brindamos información sobre ambas medidas.
El cáncer de mama es el tipo de cáncer más diagnosticado entre mujeres y la primera causa de muerte por tumores para dicho género, hablando de nuestro país. Aunque el número de pacientes aumenta a nivel internacional, la detección precoz de la enfermedad es un factor trascendental en su tratamiento y el mejor aliado. Por esa razón la mastografía y la autoexploración son claves en la lucha contra este cáncer.
Mastografía
La mastografía consiste en un estudio de rayos “X”, el cual se recomienda a mujeres de 40 a 69 años de edad, tengan o no síntomas y/o antecedentes de cáncer, ya que el propósito de la prueba es detectar anormalidades en las mamas que no se pueden percibir a simple vista o con la palpación.
Dicho estudio consiste en tomar 2 radiografías de cada mama (de los lados y de arriba hacia abajo). Ahí se buscan cambios o anormalidades en los tejidos del seno, principalmente pequeños nódulos o masas, mismas que con el tiempo pueden convertirse en problemas.
Algunas generalidades de la mastografía son:
- Tarda aproximadamente 15 minutos y causa ciertas molestias, pero éstas son tolerables.
- No todos los resultados anormales significan cáncer de mama, pues de cada 10 mastografías anormales, sólo una deriva en cáncer.
- Cuando el estudio no se realiza de la manera correcta es necesario repetirlo.
- Existen dos tipos de mastografías: la de detección oportuna, que se realiza a mujeres que no tienen signos ni síntomas de cáncer de mama y la diagnóstica, la cual se recomienda a mujeres después de detectar alguna bolita, abultamiento o con algún otro síntoma.
- Lo recomendable es que las mujeres de más de 20 años se practiquen este examen cada 3 años y las mujeres de 40 años lo hagan cada año.
Autoexploración
Para las mujeres conocer sus senos es de vital importancia, y la autoexploración mensual es una de las mejores formas de hacerlo. Además, es una medida para la detección oportuna del cáncer de mama.
¿Cómo se debe realizar una autoexploración?
Lo recomendable es observarse frente al espejo; buscando cualquier cambio en la forma, tamaño o superficie de la piel, nos referimos a hundimientos, inflamación, enrojecimiento o úlceras. Dicha observación se lleva a cabo con las manos detrás de la cabeza (se cambian de posición a la cintura y costados) mientras los codos y hombros están ligeramente hacia adelante.
También se debe:
Tocar la zona en búsqueda de bolitas, sensibilidad, dolor o consistencia diferente al resto de la mama. Lo recomendable es comenzar a palpar desde arriba, después al alrededor de la mama y luego en la parte del centro. Posteriormente, revisar la axila y el pezón.
Finalmente, queremos acotar que la mastografía es el examen más preciso para la detección de cáncer de mama, así que realizarlo en tiempo y forma puede hacer la diferencia. En Plan Seguro sabemos que lo principal es la salud, por eso te invitamos a conocer las campañas preventivas que incluyen nuestros productos de salud.
Fuente:
– Sitio web del IMSS.
– Sitio web del Centro Nacional de Excelencia Tecnológica en Salud.
– Gaceta UNAM.