Responde con toda sinceridad las siguientes preguntas: ¿con qué frecuencia asistes al médico para hacerte una revisión general? ¿Te preocupas por tu salud solo cuando te enfermas? ¿Alguna vez te has realizado un check up?
Todos estos cuestionamientos tienen una razón, y aquí te la decimos. Retomando cifras de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares, la cual es realizada por el INEGI, en el año 2016 las familias mexicanas destinaban más dinero a comprar tabaco (casi 35.2% del presupuesto) que al cuidado de la salud (solo destinaban el 2.7%).
Parece increíble, ¿no lo creen? Datos como éste son un reflejo de la falta de atención que podemos tener respecto al cuidado de la salud y la prevención de enfermedades. Hoy en día, debido al ritmo de vida, estilos y niveles de estrés, prevenir es sinónimo de ahorro y es un camino hacia el bienestar.
Un check up de prevención es…
Un check up implica realizar una serie de estudios con el objetivo de asegurarnos de que nuestro organismo está funcionando correctamente y en caso de existir alguna alteración, detectarla y atenderla en forma oportuna. En pocas palabras, el check up sirve para evitar gastos importantes en el futuro, producidos por algún padecimiento, sobre todo por la presencia de enfermedades crónicas.
En un informe realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad, se reveló que las familias mexicanas invierten, en promedio, las siguientes sumas cuando un miembro se enferma:
Cáncer de mama: más de $245,000
Enfermedades del corazón: entre $190,000 y $345,000
Diabetes e hipertensión: de $75,000 a $131,000
¿Cómo elegir un check up?
El primer paso para elegir un check up es visitar al médico de cabecera. Toda prueba o examen médico debe ser solicitado por un especialista, además ese deberá revisar a la persona para tener una idea clara de sus antecedentes médicos, historia clínica personal y antecedentes familiares en caso de requerirse.
Un check up se enfoca en la detección de: enfermedades del corazón, diabetes, cálculos biliares, alteraciones pulmonares, hipertensión, daño renal, entre otros padecimientos.
Después de que el médico examina a la persona indicará las pruebas a realizarse en el check up. Una vez que se interpretan los resultados y el médico confirma que no hay ninguna enfermedad o tendencia genética que requiera supervisión inmediata, se puede volver a visitar al especialista después de seis meses o hasta un año (seguir la recomendación del doctor).
A manera de recomendación, vale la pena que las personas mayores de 20 y 30 años de edad se sometan periódicamente a estudios como: química sanguínea, biometría hemática, examen general de orina, por mencionar algunos.
Toma en cuenta que los seguros de salud también brindan consultas ambulatorias con médicos generales y especialistas pagando solo un coaseguro, esto con la finalidad de que puedas acudir con el médico especialista que requieras a un costo accesible. Conoce los programas que en Plan Seguro tenemos para cuidar de ti, de tu salud y de tus finanzas.
Fuente: El Economista, Expansión, INEGI, Imco.