El verano ya está aquí y es una época del año en la que se disfrutan increíbles momentos. Pero, como con cualquier otra estación, también hay ciertas enfermedades comunes que debemos tener en cuenta y adoptar hábitos saludables para prevenirlas. ¡Sigue leyendo para descubrirlo!

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), en México, 70 de cada 100 personas han sido contagiadas con hepatitis alguna vez en su vida, lo cual significa que dicha enfermedad es de alta prevalencia. En lo que respecta al resto del mundo, se estima que hay 350 millones de personas que la padecen y sólo el 22% de ellas reciben tratamiento.

Los chequeos médicos regulares nos permiten detectar cualquier problema de salud antes de que se convierta en algo más grave. Muchas enfermedades, como la diabetes, el cáncer y las enfermedades cardíacas, pueden presentar síntomas silenciosos en sus etapas iniciales.

A veces puede ser tentador quedarse en casa viendo una serie o jugando videojuegos, pero salir a disfrutar de la naturaleza y realizar actividades físicas, tiene innumerables beneficios para nuestra salud y bienestar emocional.

El verano trae consigo un clima con altas temperaturas, sin embargo, también implica desafíos para nuestra piel, como la radiación ultravioleta intensa y el aumento de la humedad. Esto significa que debemos prestar especial atención a nuestra rutina de cuidado para mantenerla saludable y radiante.

Las alergias son reacciones exageradas de nuestro sistema inmunológico ante sustancias inofensivas, conocidas como alérgenos. Éstos pueden manifestarse de diferentes formas, como erupciones en la piel, picazón, estornudos, ojos llorosos, dificultad para respirar e incluso anafilaxia, una reacción alérgica grave que puede poner en peligro tu vida.

Una dieta equilibrada y nutritiva no solo proporciona los nutrientes esenciales para un correcto funcionamiento, sino que además nos brinda protección contra enfermedades crónicas, mejora la salud mental y permite llevar un estilo de vida saludable a largo plazo.

Es común sentirnos abrumados por las múltiples responsabilidades que nos ocupan, desde el trabajo y los hijos hasta las tareas del hogar y las relaciones personales. En consecuencia, tendemos a descuidar nuestra propia salud y bienestar.

El mejor momento para buscar un seguro para tu familia es hoy. No esperes a que ocurra una eventualidad, protégelos y asegura su futuro.