El cuidado de tu salud siempre estará relacionado con el de tu economía y tu educación financiera. Nadie piensa o desea enfermarse, y como justamente no es algo que tengamos presente puede tomarnos por sorpresa y desestabilizar nuestras finanzas personales o familiares.
Uno de los datos más destacados de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2018 es que únicamente el 28% de las personas, que no tienen una cuenta bancaria en alguna de estas instituciones, realizan un presupuesto de forma habitual, es decir, dividen el dinero que ocuparán durante la semana, quincena o mes, tomando en consideración sus necesidades.
Entonces, si no tomamos en cuenta nuestro presupuesto para asignarlo a gastos cercanos o inmediatos, ¿estaremos listos para resolver una situación de emergencia en caso de que se presente una enfermedad? ¿Qué hacer para llevar mejor nuestras finanzas personales?
La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) ha comentado en diferentes momentos que para alcanzar unas finanzas personales “sanas”, a lo largo del año y mantenerlas así, es indispensable fijar nuestra atención en el dinero, en cómo destinarlo y no dejarnos llevar por ciertos impulsos de compra.
Vinculado a este último punto, en el sitio web de la AMIS se menciona que para no caer en desajustes financieros es trascendental tener las deudas bajo control. ¿En que se traduce dicha frase? Bueno, lo recomendable es que éstas no rebasen el 30% de los ingresos de una persona, considerando el pago de tarjeta de crédito, préstamos en caso de haberlos, créditos personales o de cualquier otro tipo.
Consejos para cuidar tus finanzas
1. Trata de tener un fondo para imprevistos. Aunque es algo esencial en ocasiones nos olvidamos de guardar una parte de nuestro dinero para los imprevistos. Intenta hacerlo de forma mensual para que poco a poco adquieras el hábito. Empieza con un porcentaje bajo de tu ingreso, quizá 5%, y auméntalo en la medida de lo posible.
2. Conoce tus hábitos financieros y ajusta lo que sea necesario. Pon atención en los gastos que haces y en tus razones. No se trata de juzgarse sino de conocerse. De esa manera podrás modificar tu mentalidad financiera.
3. Paga tus deudas y no las acumules. Para que puedas destinar una parte de tus ingresos a tu fondo de imprevistos debes comenzar por saldar tus deudas. Un consejo es que cada que recibas una compensación o exista un sobrante de recursos lo utilices para pagar. Ponte metas y ve liberando saldo.
4. No compres o contrates si no conoces el contexto. Muchas veces nos dejamos llevar por este impulso de compra o por lo que está de moda. No porque todas las personas adquieran algo tú debes adquirirlo. Siempre que estés a punto de cerrar una contratación asesórate con un experto y analiza los pros y contras del servicio.
La importancia de una cultura de la prevención para tus finanzas
Propiciar que los riesgos sean mínimos ayuda a tu economía. En materia de salud, la prevención es clave para evitar la aparición de algunas enfermedades y mantener un estado óptimo que nos permita seguir disfrutando la vida al máximo.
Al contratar un seguro de salud también adquieres servicios preventivos que te permiten monitorear el buen estado de tu cuerpo, y así evitar un desajuste financiero que pudiera afectar a todos en casa. Un claro ejemplo de dichos servicios son las campañas preventivas enfocadas en padecimientos como la diabetes o el cáncer.
En el caso particular del cáncer, la Organización Mundial de la Salud ha informado que esta enfermedad es una de las que mayor impacto tiene en la economía de una familia, y desafortunadamente cada año se registran en promedio 14 millones de nuevos casos.
La contratación de un seguro de salud o de gastos médicos mayores puede entenderse como una medida que disminuye el riesgo de sufrir un desajuste financiero en caso de que alguna enfermedad se haga presente. En Plan Seguro tenemos más de 20 años ofreciendo planes y servicios que se enfocan en cuidar y mantener tu salud.
Fuente: Diario Milenio, OMS, Grupo Acir, Dinero en Imagen, AMIS.
